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Circulación sobre línea continua en las calles de Oviedo


Salvo casos excepcionales (como para superar a un ciclista) la marca vial de línea continua no debe superarse. Sin embargo, con la puesta en servicio de los reductores de velocidad en varias calles de Oviedo, muchos conductores (por no decir la mayoría) optan por ignorar la ley y pasar al otro carril, pisando la línea continua (y superándola) poniendo con ello en grave peligro a los automóviles que circulan en sentido contrario, ya que puede producirse un choque frontal entre ellos, o a los que circulan a su lado en el otro carril (caso de vías de un único sentido).

Especialmente graves son en Oviedo dos tramos con esta problemática: la entrada por Alcalde García Conde, y el tramo de carretera alrededor de Rubín, a su paso por Los Prados. En ambos sitios solo hace falta estar un par de minutos observando para comprobar cómo constantemente es práctica habitual la invasión del carril contiguo, traspasando la linea central de la carretera, con el objeto de evitar los reductores de velocidad.

Las placas de calles más inservibles del mundo


En el ímpetu de hacer de Oviedo el patio de su casa que tenía el anterior alcalde Gabino de Lorenzo, no solo adquirió unas farolas contraproducentes para el clima asturiano (que se oxidan solo con mirarlas y que llevan mas capas de carísima pintura encima para darles lustre que en los servicios municipales ya han perdido la cuenta) sino que le dio por adquirir costosísimas placas para las calles de estilo "vintage" (un diseño rococó que le encantaba a Gabino) que empezó a atornillar en las esquinas de las calles.

Esas placas no solo son pesadas (con el deterioro para las fachadas que ello implica) sino que son, además, muy difíciles de ver debido a su color negro y parduzco. Pero parece ser que al otrora alcalde de Oviedo le importa un pimiento los ciudadanos y darles servicio (que para eso fue elegido), y lo que más le importa era satisfacer sus gustos personales.